¿Cómo hacer para que una estrategia de Traiga Su Propio Dispositivo en las escuelas no se convierta en Traiga su propio desastre?
El boom de la movilidad ya llegó a la escuela, y eso no se puede negar. Esto detonará un dilema a considerar dentro del sector educativo: el Bring Your Own Device. Algunas instituciones académicas son early adopters de esta tendencia pero la mayoría sigue en transición, entre proveer acceso a Internet a su comunidad y entrar de lleno al BYOD. “Vamos hacia eliminar por completo el papel y el lápiz, y que todo se haga desde el dispositivo móvil: hacer exámenes, buscar resultados, realizar trámites de inscripción, ver calificaciones, etcétera”, dice María José Albarrán, Gerente para Cuentas de la Vertical Educativa de Fortinet México.
Se masificará por la practicidad que representa que los estudiantes prefieran llevar sus propios gadgets, pues la escuela se evita tener que adquirirlos para su matrícula escolar (y encargarse de su mantenimiento, reparaciones, etc.), administrar su renta o, en su caso, cargar el gasto a los padres mediante la colegiatura.
Pero el BYOD también traerá consigo ciertos retos, como dotar de conectividad necesaria, garantizar la seguridad de redes y datos, y facilitar la operación de cientos o miles de dispositivos pretendiendo accesar a diversos recursos internos, interactuando con otros gadgets, participando en dinámicas académicas, y más. El ambiente heterogéneo y la pérdida de control también significan un desafío para los administradores TI.
Para Alejandra Montufar, Gerente de Desarrollo de Negocios de Comstor para el Sector Público de Educación y Salud, esta iniciativa requiere comenzar por un estudio preciso para dimensionar qué se requiere para brindar un acceso adecuado. “Si por ejemplo se ofrece educación a distancia, hay que tener una infraestructura que soporte un determinado número de estudiantes conectados, tanto desde la propia escuela como de otros puntos”, menciona.
Cada escuela –según su tamaño, los servicios que ofrece y el nivel de involucramiento que desea que haya entre tecnología y programa académico– sabrá qué elementos debe incluir en su valoración del BYOD, pero hay tres puntos que deben ser considerados siempre:
Seguridad
En la experiencia de la ejecutiva de Comstor (el mayorista más grande de Cisco a nivel mundial), la seguridad es un aspecto que se deja de lado en la mayoría de los proyectos del sector educativo. “Suele suceder que prefieren un mayor almacenamiento que invertir en seguridad”, dice.
Éste es un tema prioritario no sólo para ella; también para Albarrán (de Fortinet), quien considera que la vertical educativa es de las más complicadas por la evolución de los dispositivos móviles, “pero apoyarse en una política de seguridad ayuda mucho, indica. Clasificación de usuarios, autenticación, definición de contenidos permitidos y establecimiento de horarios, por ejemplo, deben formar parte de la estrategia”.
No menos importante es la seguridad en los propios dispositivos. “La escuela no conoce los equipos móviles que entrarán a su red, así que resulta imprescindible que éstos se alineen a reglas de seguridad”, expone Juan Carlos Cabrera, gerente general de Ruckus México. El que los dispositivos cuenten, cuando menos, con un antivirus instalado, es un must sin duda, puesto que, según Eulogio Díaz, Director General de G Data, “los usuarios a veces no contemplan el riesgo de instalar supuestas aplicaciones gratuitas que en realidad contienen troyanos con los que abren el acceso a la red de la escuela a hackers”.
Administración
Es vital conocer quién se conecta a la red, para qué, por cuánto tiempo, etcétera. Además, la administración implica desde capturar la MAC Address y dar de alta los dispositivos en una base de datos, hasta asegurar que cada gadget tenga ciertas características en cuanto a versión del sistema operativo, antivirus y aplicaciones que la escuela requiere que el estudiante accese, tanto dentro como fuera del plantel. De igual manera, permite restringir el uso de ciertas aplicaciones o el acceso a determinadas páginas web, por ejemplo.
Para las labores de gestión, además de las soluciones MDM (Mobile Device Management) y MAM (Mobile Application Management), hay plataformas que automatizan la autenticación a la red de los usuarios (mediante un esquema de user y password), e incluso, según señala Cabrera, de Ruckus, mediante entornos de nube es posible prescindir del log in diario: “Te registras como usuario una sola vez, y el sistema arroja un certificado específico. La base de datos ya no es de usuarios y contraseñas, sino de certificados, y sólo se requiere administrar éstos. Y el estudiante o docente ya no deben loggearse diario; el certificado tiene la duración que se le haya asignado, sea de un semestre, el año o como la escuela lo decida”.
Sensibilización de usuarios móviles
Para las escuelas que practican el BYOD, es importante promover continuamente la cultura informática, tanto con estudiantes como con docentes y administrativos. “Siempre está el riesgo de abrir archivos adjuntos en correos que en realidad son malware, expone el directivo de G Data.
En ocasiones los alumnos piensan que por tener un equipo con iOS o Android, no serán atacados, pero no es así. Hay más de 1,000 millones de dispositivos con sistema operativo Android, y los hackers están enfocados en este mercado no sólo para robar información del smartphone, sino esperando que su víctima se conecte a una red para maximizar su fechoría.”
Puntos a considerar para una estrategia BYOD exitosa
Eduteka, portal colombiano de libre acceso para docentes y directivos escolares interesados en mejorar la educación con el apoyo de las TICs, sugiere una serie de elementos a tomar en cuenta en términos de infraestructura al adoptar modelos BYOD, basado en los ejes de su modelo MiTIC@.
Hardware y software
• Suministro de dispositivos móviles. Si bien el estudiante trae su propio gadget, la escuela puede disponer los sumamente necesarios (cuando la familia del alumno no pueda costear su compra).
• Software estándar. Hay muchas aplicaciones disponibles y gratuitas hoy día. Sólo hay que asegurarse de que estén disponibles para todos los sistemas operativos y que el alumno pueda descargar las que usará en clases.
• Plataforma. Debe implementarse un ambiente que permita a estudiantes, tanto accesar a las aplicaciones, como compartir trabajos con docentes y compañeros.
• Carga de baterías. En cada salón y espacios sociales, conviene contar con un centro de carga de baterías.
Conectividad
• Ancho de banda. Éste debe ir acorde con la cantidad de dispositivos móviles que puedan estar en uso en un momento dado dentro de la escuela. El consumo de más contenidos multimedia requiere un mayor ancho de banda y mayor velocidad de descarga.
• Cobertura. En espacios clave (biblioteca, auditorio, etcétera), y en las aulas, hay que garantizar cobertura de la conexión inalámbrica a Internet de alta calidad.
• Capacidad inalámbrica. Esto hace referencia a la capacidad para soportar una cantidad considerable de conexiones concurrentes, lo cual es diferente a la cobertura. Los puntos de acceso inalámbricos deben ser los adecuados.
• Uso de filtros. Es imprescindible una política para el acceso a sitios Web. Aquí la escuela decidirá si usar algún software de filtrado en su servidor Web para impedir el acceso a ciertas páginas en determinados horarios.
• Interoperabilidad. Es preciso definir cómo se conectarán los gadgets de los alumnos con otros equipos disponibles en la escuela, como tableros digitales, proyectores de video o impresoras.
Soporte técnico
• Política de uso aceptable. Conviene crear y difundir un reglamento que puntualice espacios, horarios y funcionalidades necesarias de los equipos móviles dentro de la escuela, incluyendo políticas sobre uso de redes sociales, IM y publicación de contenidos
• Servicio técnico. Es deseable disponer una oficina que preste el servicio de resolver problemas menores que pueda presentar el gadget, e incluso diagnosticar complicaciones mayores y orientar a su dueño sobre cómo solventarlas.
• Buenas prácticas. Conviene programar talleres periódicos (para profesores y estudiantes), sobre el cuidado y mantenimiento de sus dispositivos.
• Almacenamiento. Es vital definir dónde se guardarán contenidos digitales y las políticas de manejo de copias de respaldo. Esto puede hacerse a sea en la nube u on premise.
• Seguridad. La administración de la red debe calificar el ingreso de los usuarios, definir horarios y emplear procedimientos de autenticación; esto aunado a un firewall que proteja la red de datos de posibles virus, malware o usuarios no autorizados.
• Prepare su estrategia
De acuerdo con Cabrera, Educación es la vertical de mayor crecimiento para los próximos años. “El mercado potencial es muy grande, pues no todas las instituciones están avanzadas en la materia.” No obstante, el negocio será para los canales o integradores más preparados. Para participar en esta tendencia, deben saber de autenticación en la nube y por certificado, administración de dispositivos, seguridad, filtrado de contenidos, e ingenierías avanzadas para dar el ancho para estos proyectos.
A juicio de Ruckus, los partners que puedan ofrecer el BYOD como un servicio administrado, en lugar de venderlo, serán los más que tomarán la mayor ventaja. “Esto es porque el flujo de dinero de la escuela es mensual (con las colegiaturas), así que les es muy atractiva la administración pagada vía OPEX, en lugar de CAPEX”, explica Cabrera.
Fuente:
http://boletin.com.mx/datacenter-almacenamiento-y-respaldo/item/4073-aproveche-los-beneficios-del-byod
